lunes, junio 27, 2005

Mi formación rebelde

Me acabo de enterar de que el Colegio Williams (en el que estudié 13 años de mi vida, nomás) organiza este año un curso de verano RBD. ¡Me siento orgulloso de alma mater! Incluye visita a las locaciones de grabación del excelso programa y autógrafos personalizados de las actrices que hacen de Lupita y María José, mismos que entregan ellas mismas en el transcurso de una cena romántica a todo vapor. ¡Ejem!... Bueno, algo así. Pueden checar las especificaciones del "Verano Rebelde" en www.colegiowilliams.edu.mx. Yo voy a mandar mi solicitud. Si el día de la entrevista logro verme como un chavo rebeldón de entre 5 y 14 años, ¡estoy dentro!

domingo, junio 26, 2005

Mercader de Venecia

Se supone que uno debe poder ir al teatro sin haber leído la obra en cuestión y entender lo que ocurre en escena (pues el teatro está escrito, precisamente, para ser representado, no para ser leído). Bueno. Pues yo no he leído El Mercader de Venecia, pero fui a la obra anoche, y no pude atar cabos de lo que vi en sobre las tablas. Qué decepción.
El montaje corre a cargo de la Compañía Nacional de Teatro, lo cuál es aún más desconcertante. La adaptación ubica la obra en la Venecia de finales de los '30. Hay una muy buena parodia de Hitler y la divertida aparición de un "rey mexicano" (un charro), pero más allá de esos guiños poco shakespearianos a la concurrencia contemporánea, hay poco qué rescatar. El vestuario de los actores es por momentos muy adecuado (a los años '30), pero a veces salen vestidos con atuendos medievales e incluso clásicos. No hay una línea del tiempo bien definida, y la fragmentación del tiempo y el espacio en escena no parecen justificados.
Los actores bien, aunque cargando las tintas (mucho) en los momentos dramáticos, a tal grado que por momentos se encuentran a punto de causar risa en vez de tristeza o dolor. Hay una escena, poco después del intermedio, que emula un juicio en un tribunal. Contiene todo lo malo de la obra, y dura como media hora. Recuerden al coronel Jessep y al teniente Kafee en Código de honor y se darán una idea. Ahora eran Shylock y Antonio a punto de gritarse: "You want the truth?... You can't hadle the truth!!!" Se ve bien en una peli de cadetes justicieros, pero en una obra de Shakespeare nnno lo creo...
De la escenografía y la iluminación sólo puedo decir que vi cosas mejores en mis tiempos de preparatoria: sin demeritar el estupendo trabajo de Enrique Cortés, pero poniendo muy en duda la capacidad de la que debería ser una de las mejores compañías de teatro del país.
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El Mercader de Venecia, de William Shakespeare, se presenta traducida por José Molina Foix y adaptada por Raúl Zermeño y Jorge Rodríguez en el Teatro Julio Castillo. Dirige Raúl Zermeño. Actúan Fernando Becerril, Juan Manuel Bernal y Jana Rauly, entre otros. La localidad cuesta 150 pesos. Calificación ergozoom: 60.

Voilà le Metrobus! (II)

Me han informado de nuevos y mejorados servicios que ofrece el MB.
- Es gratis (hasta mediados de julio, por lo menos).
- Incluye masaje (sobre todo si se aborda en horas pico...)
- Sí tiene aire acondiconado (y el aire que sale del mismo sugiere la posibilidad de un baño sauna durante el trayecto).
- Funciona como "lugar de encuentro", dada la conveniente cercanía entre los usuarios a bordo (una amiga casi concreta una cita con galán metrobusero).
Pese a las insistentes recomendaciones de usuarios satisfechos, sigo reservando mi primer viaje para una fecha posterior: dicen que, pese a sus insoslayables ventajas, el MB no puede más que mejorar y yo lo quiero abordar en su mejor momento.

miércoles, junio 22, 2005

Sin comentarios

¿Qué en este mundo puede importar menos?
Las tres notas, publicadas en TVnotas de esta semana:
1) "María Marcela: 'Sufro el síndrome de Tietze; se me inflaman los cartílagos costales y no puedo hacer ejercicio ni reírme fuerte, porque me da un dolor ¡tremendo!'"
2) "Ana La Salvia, a casi 2 meses de dejar Cada mañana: 'Me he dedicado a arreglar el cuarto de mi hija y atender a mi marido'".
3) "A sus 6 meses de embarazo, Flor Rubio nos dijo: 'Los padrinos de bautizo de mi hija serán sus tres hermanos, que son los hijos de Rafael'".
Voto por la uno, que me desternilló de risa.

100 mexicanos dijeron

Me acaban de pasar (gracias, Tiro) la lista de las 100 mejores citas citables de las películas americanas, según la AFI. Pueden checarla completa en http://www.afi.com/tvevents/100years/quotes.aspx#list. Yo les paso al costo las tres primeras:
"Frankly, my dear, I don't give a damn". (Lo que el viento se llevó, 1939)
"I'm going to make him an offer he can't refuse". (El Padrino, 1972)
"You don't understand! I coulda had class. I coulda been a contender. I could've been somebody, instead of a bum, which is what I am". (Sin novedad en el frente, 1954)
Hay cosas muy raras, como "Toga, Toga", de una película llamada The National Lampoon's Animal House o "La-dee-da, la-dee-da" de Annie Hall. En ese contexto no sé por qué no incluyeron algún "Weeoow" de Chewbacca en cualquiera de Star Wars.
Aportaciones mexicanas que deberían estar en la lista:
"´Si quieres hacer reír a Dios, cuéntale tus planes". (Amores perros, 2000).
"S'ordenes jefeee!" (El Patrullero 777, 1977).
"Aviéntenles mentadas, que también les duele". (La cucaracha, 1959).
Se aceptan sugerencias.

lunes, junio 20, 2005

Celebrity Deathmatch, a la mexicaine!

En una esquina (¿la izquierda?) "El Rayo de Esperanza". En la otra (¿la Sur?) El Subcomandante Marcos.
Primer round.
"AMLO oferta una mediación y una administración 'modernas' (o sea terminar lo que dejó pendiente Salinas de Gortari). Y más: ofrece crear las bases de un Estado 'moderno', por eso se esfuerza en diferenciarse de Lula, Chávez, Castro y Tabaré. Y el ofrecimiento no lo hace a los de abajo o a lo que queda de la Nación mexicana, sino a quien manda en realidad: el poder financiero internacional. La de él no será una administración neoliberal con la mano izquierda (Lula en Brasil, Tabaré en Uruguay, Kirchner en Argentina), ni un gobierno socialista (Castro en Cuba), ni un nacionalismo popular (Chávez en Venezuela), sino EL NUEVO MODELO DE ESTADO NO-NACIONAL (ese engendro de la guerra neoliberal) en América Latina.
Si Carlos Salinas de Gortari fue el gobernante ejemplar de operador de la destrucción neoliberal en México, López Obrador quiere ser el paradigma del operador del reordenamiento neoliberal. Ese es su proyecto. Aunque falta que lo dejen o que pueda. No nos vamos a dedicar a descalificar a AMLO (de eso se encargará, y con inmejorable eficiencia, el PRD -sobre todo en la lucha por la candidatura al gobierno del DF-), pero consideramos nuestro deber advertir, definir y definirnos".
WHAAAT?! ¿O sea que Marcos va contra AMLO? ¿Y qué hay del "primero los pobres", "soy un rayo de esperanza" y "los quiero desaforadamente"? ¿No significa eso algo? De cualquier manera, eso ca-lien-ta. López: ¡tus seguidores esperamos (no: exigimos) una enérgica respuesta! Un llegue, por lo menos, que se sienta hasta la Selva Lacandona.

Voilà le Metro Bus!

¿Recuerdan el comercial de "Solidaridad" en el que un joven le gritaba a un viejito: "Don Chucho, don Chucho, ya tenemos carretera"? No le cabía el corazón en el pecho. Como a mí ayer cuando vi el Metro Bus en Insurgentes. Ah, qué lindo el Metro Bus. No me subí, porque no tenía a dónde ir en él... y porque iba atestado (claro, como por ahora es gratis). Pero qué re chulo se ve. Nuevecito, limpio, con esas pantallas laterales y sus carriles confinados. Me pregunto: ¿tiene aire acondicionado?, ¿huele a nuevo?, ¿música ambiental?, ¿dan avisos de próxima parada? Qué bien sentirse como en Chicago estando en el DF...
Pero eso no es todo, no... ya estamos juzgando a los responsables de la "guerra sucia", le ganamos a Brasil en la Confederaciones, tenemos Metro Bus en Insurgentes... ¡Cuídense, países del G-8, porque en un descuido nos colamos al primer mundo!

viernes, junio 17, 2005

Batman inicia

Batman inicia siendo un tipo asustado (aunque no cobarde), con ánimos de venganza (aunque no sepa cómo llevarla a cabo)... y con una fortuna de miles de millones de dólares que no podemos decir que le estorbarán en su empeño por "encontrarse a sí mismo".
Lejos de las aberraciones que Joel Schumacher hizo con Batman y sus personajes, pero respetuoso con el tratamiento que les dio Tim Burton, Christopher Nolan presenta Batman inicia con la esperanza de revitalizar la franquicia que parecía muerta luego de Batman y Robin (1997).
Debo decir que la película no es lo que esperaba. Y no sé si eso sea bueno o malo, porque no tengo muy claro qué esperaba de ella, sólo sé que era mucho. Supongo que debo verla de nuevo para disipar las dudas.
¿Qué me gustó? Que finalmente nos enteramos no sólo de por qué Bruce Wayne decide convertirse en Batman, sino también de cómo. Que el personaje es más complejo que los anteriores Batmans. Éste no es el típico súper héroe bueno rayando en la ñoñez (Yes, I'm talking to you, Superman!); este Batman tiene miedo, coraje y vergüenza, entre otros rasgos que lo hacen humano... y entrañable. Y que salen un montón de buenos actores que siempre da gusto ver en pantalla (Michael Caine, Morgan Freeman, Gary Oldman y Liam Neeson, entre otros) trazando sus personajes con exquisita maestría.
¿Qué no me gustó? Que Batman inicia complejo, pero termina estereotipado. Algo que me parece inevitable en una película de súper héroe pero que no por eso deja de molestarme. Defino estereotipo: la vocecilla ronca que Bale murmura cuando habla como Batman (suena falso, aunque se entiende que no quiere le reconozcan la voz); las persecusiones en el Batimóvil (ahora parece un Hummer con turbina de avión) y la forma milagrosa en que salva a Ciudad Gótica de su destrucción. Pero, como decía, todo eso ha de ocurrir siempre en una película de súper héroe, ¿o no? Y ya entrados en esas lides me parece que Batman cumple con suficiencia. Sí, es una película hecha "con receta", pero sabemos bien que se pueden tener la receta y los ingredientes, pero si el cocinero es malo el omelette no se salva. Batman inicia: redonda, y muy prometedora para las secuelas por venir.

Íthaca

Cuando emprendas el viaje a Íthaca,
Pide que el camino sea largo,
Pleno de peripecias, pleno en conocimiento.
A los Lestrigones y a los Cíclopes
O al furioso Poseidón no temas,
Tales cosas no hallarás en el camino
Si mantienes elevado el pensamiento
Y una emoción sublime embarga tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a Lestrigones ni a Cíclopes
Ni al violento Poseidón encontrarás
Si no los llevas dentro del alma,
Si tu alma no los erige ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas estivales
En que con cuánta dicha, con cuánta alegría
Entres a puertos nunca vistos:
Detente en los mercados fenicios
Y adquiere sus hermosas mercancías,
Ámbar y ébano, marfiles y corales,
Y perfumes voluptuosos de toda clase;
Recorre las ciudades egipcias
Y aprende, y aprende de sus sabios.

Ten siempre a Íthaca en tu pensamiento.
Llegar ahí es tu meta.
Mas no apresures el viaje en absoluto.
Mejor que dure muchos años:
Y que ancles en la isla ya viejo,
Rico con cuanto ganaste en el camino,
Sin esperar que Íthaca te dé riquezas.

Íthaca te dio el viaje.
Sin ella no hubieses emprendido el camino.
Mas ya no tiene nada que darte.

Y si pobre la encuentras, Íthaca no te ha engañado.
Así, sabio como llegaste, con tanta experiencia,
Ya habrás comprendido qué significan las Íthacas.


Konstantinos P. Kabafis F. (1894)
(Traducción de Paola B. Cano) (¡Gracias!)

miércoles, junio 15, 2005

Man on the Border

Me gustan las películas (y las novelas) que ubican a sus personajes (y en cierto modo también a sus lectores) en situaciones límite. Hablo de películas como Exterminio e incluso Armagedón o Impacto profundo. O de novelas como El señor de las moscas. En la mayoría de los casos se plantea una cuestión interesante: la ineludible destrucción del planeta (o por lo menos del mundo tal como lo conocemos)... hasta que llega Bruce Willis a salvarlo. Yo disfruto siempre la primera parte de la premisa.
En fin. Que me he leído La guerra de los mundos sabiendo que en pocos días se estrena la versión cinematográfica que de la novela dirigió Steven Spielberg.
Hay muchos clichés en el libro de H. G. Wells. O lo parecen ahora: quizá cuando se publicó (1898), éstos no lo eran. Como sea: cliché 1: los marcianos son seres malignos; cliché 2: son seres repugnantes; cliché 3: son notablemente más inteligentes que nosotros (por lo menos eso sugiere su avance tecnológico) pero no pueden prever su inevitable final (evito revelarlo por quienes no han leído el libro).
Pero el punto era la situación límite y, al menos para mí, las reflexiones a que ésta obliga. Hay un factor del que se desprende lo mejor y lo peor del Hombre: el miedo. El modo en que lo enfrentamos nos hace héroes o cobardes. Seres dignos o indignos de sobrevivir. Los cobardes, dice uno de los personajes de la novela, serán domesticados: "en unas cuantas generaciones más serán grandes, hermosos, de sangre azul y estúpidos". Por otra parte, quienes se den cuenta de que "la vida vuelve a ser real", corren el riesgo de permanecer libres y convertirse en salvajes.
¿Qué harían si un marciano armado con un rayo de fuego y ninguna intención de negociar llegara a su ciudad arrasando todo a su paso? Igual en caso de un sismo, de un incendio, de un tsunami, de una carambola en la carretera... ¿Qué tipo de hombres somos en situaciones límite?
Échense el libro de Wells. Vale la pena. Yo lo compré por menos de cien pesos en la edición que recién sacó la editorial Sexto Piso. Y esperemos la película de Spielberg. No con grandes expectativas, pero esperémosla.

¡Gracias, Chivas!

De una nota de Daniel Lagares en el diario Clarín:
"La táctica. ¿Qué táctica? La táctica sirve para plantear partidos, buscar caminos, cerrar los ajenos, tratar de producir las condiciones para que prevalezcan los jugadores propios y fracasen los adversarios. Eso se intentó en la ida y fue fracaso. Cuando se arranca 0-4 no hay más táctica posible que elegir a los 11 y mandarlos al frente, al ataque, al palo por palo. Benítez escogió a la vieja guardia y no fue casualidad. Cuando el Titanic ya había chocado con el témpano de los cuatro goles en Jalisco y se iba a pique, recurrió a los antiguos. Se hundían o se salvaban, pero juntos. El intento naufragó porque, como quedó dicho, Boca no pudo con sus limitaciones para jugar. A la impotencia había un paso. Y se terminó despidiendo de la Copa con un gran escándalo".
Chivas: ¡con todo por el pase a la final!

miércoles, junio 08, 2005

Me vi Rebelde

Bueno, en realidad no fue un capítulo completo. Pero casi. Mis notas al respecto:
- En esas falditas hasta las gordis se ven sexys.
- ¿Chiste autorreferencial? Un fotógrafo le pide a uno de los protagonistas que pose "como si estuvieras pensando"... Me río mucho.
- La escuela le da un aire a la academia donde estudia Harry Potter, ¿no? Aunque, claro, sin libros. Y sin magia.
- Dos personajes femeninas se agarran, literalmente, de las greñas. (Perdón: no sé por qué anoche eso me pareció relevante...)
- En los comerciales, igual se anuncian spots autorreferenciales (una chica RBD promueve Saba íntima) que a Walter Mercado.
- Me doy cuenta de que la gordis del principio es una maldita: tacha de la lista de invitados a una fiesta que no es suya a una chica que le cae mal. ¡Arde en el infierno, gordiiiis! (¡Ejem!) Sigue siendo sexy, sin embargo.
- Enrique Rocha entra en escena con su voz de Marlboro-man y peinado de quinceañero. Me río. Dice que es candidato a la jefatura de gobierno del DF (emulando al Peje, a Marcelo, a Rosario Robles... ¿a quiééén?). Me río más. Luego amenaza a una alumna que no sabe fingir un buen susto. Me carcajeo. Mi mamá, que entra a la cocina a preparar su cena, me mira con sospecha: es la primera vez que veo una telenovela en casa (antes lo hacía en casa de mis abuelos: larga historia para otro post).
- Qué. ¿Estos tipos nunca toman clases? ¿Cómo hacen para estar tanto tiempo en la escuela y no entrar a un salón?
- Más comerciales: ahora spots de Rubén Mendoza (sin pelotas para los niños). Otro del niño verde. En total, 6 minutos de comerciales por 7 de telenovela, al menos en ese bloque.
- Conclusión primera: La telenovela es tan mala que parece buena.

domingo, junio 05, 2005

The Monterrey Post 04

Tres momentos inolvidables de este viaje a Monterrey:
- La caminata nocturna del viernes por la noche-madrugada por la Macro Plaza y parte del centro de la ciudad, acompañado de Foco, César y Manuel (compañeros suyos de la maestría en el Tec). Caminar me encanta, pero hacerlo en una ciudad ajena me entusiasma mucho más. El elemento nocturno y la inmejorable compañía terminaron de hacer el momento memorable.
- La visita al Museo de Arte Contemporáneo, ayer, con Foco. Sobre todo por el re-descubrimiento de hecho artístico que es el arte contemporáneo. Una obra en particular, Mystic Transport, de Gülsun Karamustafa, nos encantó. Se trata de unos viejos botes de ropa sucia que contienen cobertores de diferentes colores. La intención del artista es que el espectador haga suya la obra y mueva los botes a su libre albedrío. Pocos lo hacen. Nosotros pusimos, literalmente, manos a la obra, y trazamos con ellos algunas líneas curvas y ubicando a uno de ellos, aislado, bajo un reflector de la sala. Nos pareció maravilloso poder "hacer arte" de esa manera. Había intención estética y toda la cosa.
- El día de pesca, hoy, con Foco, César, Manuel y Lucero (otra compañera del Tec). Manuel nos enseñó a hacer cañas de pescar... e intentó enseñarnos a pescar. Sólo él y César tuvieron éxito. Yo estuve cerca: pesqué una trucha pequeña que los dueños del criadero decidieron devolver al río (haciéndome sentir híper culpable al explicarme que estaba "muy lastimada") y una trucha gigante rompió el anzuelo con el que la había atrapado justo cuando intentábamos atraparla con una red. Estuvimos ahí más de dos horas, en medio de un inolvidable paisaje montaño-rocoso y una temperatura de lo más agradable.
- Y, claro, el concierto de los tenores que, pese a los inconvenientes (o quizá precisamente gracias a ellos), fue sin duda inolvidable.

The Monterrey Post 03

Del diario El Norte, la columna política firmada por M.A. Kiavelo (el F. Bartolomé de por acá), sobre lo ocurrido ayer en el Parque Fundidora, antes, durante y despúes del concierto de los tenores:
"Lo malo es que Monterrey, en general, demostró el nivel de infraestructura que tiene con el desastre vial que provocó el evento. Entrar, salir o siquiera pasar por la zona de Fundidora resultó una aventura que dejó muchas dudas sobre la viabilidad de traer a esta ciudad un evento de clase mundial. La situación fue tal que requiere un serio examen por parte del Gobierno del Estado, que sueña con el Fórum, pero que realiza eventos como el de ayer. Y conste que aquí no basta con voltear a ver a la empresa Latin Events Promotions, a la que se le dio el contrato del concierto. Porque la organización pudo ser de esa empresa, pero la imagen es de Nuevo León".
En el mismo periódico, Gerardo Kleinburg, sobre el concierto en sí mismo:
"Plácido Domingo hizo gala de una lozanía vocal inverosímil, de una atigencia estilística infalible, de una expresividad y fuerza vocal arrolladoras. Carreras, el heroico sobreviviente de una mermadora leucemia, ejemplo indudable de amor a la vida y fuerza de voluntad, hizo su acostrumbrado y meritorio derroche de expresividad musical y empeño vocal, a pesar de que la cuesta que debe remontar cada vez sea más empinada, a pesar de una serie de tropiezos y limitaciones vocales (agudos ya inexistentes, vibrato excesivo, sonidos rotos) que ya son, tristemente, parte habitual de su canto (...) Alejandro Fernández, primero, se mostró cauto, mesurado y, acaso, demasiado 'académico' (...) luego se relajó y cantó con su habitual corrección y compromiso".

The Monterrey Post 02

Les juro que llegó un momento en el que la gente empezó a gritar "fraude, fraude". Y había razones de sobra. Una hora y media antes del inicio del concierto la fila para entrar era de no menos de un kilómetro. No me explico semejante estropicio por parte de los organizadores. No sólo la cola era larga. Tampoco hubo UNA SOLA PERSONA que atendiera las dudas de las decenas de personas que no sabían si tenían que formarse ahí o si su entrada era por otra puerta. Menos hubo control sobre la gente que se metía a la fila y sólo a la buena educación de la gente puedo atribuir el hecho de que no ocurriera un incidente violento en ese sentido.
Luego de pasar los detectores de metal (más bien ormanetales: cada persona que pasaba hacía sonar la alarma sin que eso preocupara al escasísimo personal que controlaba la entrada), el caos reinaba en el Parque Fundidora. Una vez más, ningún señalamiento para ubicar las localidades y, los pocos acomodadores que había, aturdidos por decenas de personas que solicitaban sus servicios. Con mucha suerte llegamos a nuestros lugares. Lamentablemente se encontraban a tres filas de un pasillo por el que la gente no dejaba de pasar ni siquiera media hora después de empezado el evento. Nunca mejor dicho: el desconcierto era total. Un grupo de asistentes, en nuestra zona, decidió hacer justicia con mano propia y de plano clausurar el pasillo que nos impedía ver el escenario (se recorrieron un par de metros hacia adelante y obstaculizaron el paso de quienes buscaban sus lugares).
Mucha gente estaba molesta y, cuando la orquesta empezó a tocar el "Huapango" de Moncayo, en varias partes del Parque se empezó a escuchar el grito de "fraude, fraude". Duró poco, y no se repitió, pero hizo notar la gran molestia del "respetable". El resultado final fue que centenas de personas se quedaron varadas entre los pasillos y fueron obligadas a ver el concierto de pie. Más tarde me enteré de que un amigo de Foco se quedó fuera del Parque, con dos boletos de 840 pesos en la mano: parece que como a las 9:30 cerraron las puertas y sólo dejaban entrar previa advertencia de que sería bajo su propio riesgo, pues algunas de las tarimas que sostenían las tribunas estaban flojas. Luego, dos personas más me comentaron que en la televisión corrió el rumor de las tarimas flojas y que incluso en algún medio se habló de un accidente durante el concierto. El caso es que la organización fue un absoluto desmadre. Y una lástima, claro. Porque el concierto de los Tres Tenores era la carta de presentación del Fórum Universal de las Culturas que se celebrará aquí en 2007. Es triste decirlo, pero después de lo que vi hoy pienso que Monterrey no merece el Fórum. Si el gobierno de la ciudad (y el del estado) no es capaz de contratar una empresa con la experiencia y los medios necesarios para organizar un evento de este tipo, no me quiero imaginar cómo se les va a salir de las manos un evento como el Fórum. Si yo fuera Natividad González estaría muuuy preocupado (y más encabronado), porque el ridículo, la exhibición de incompetencia, fue total.
Del concierto en sí espero escribir más adelante. Fue bueno. Pero la nota, por decirlo en términos periodísticos, estuvo en lo atroz de la organización y no en el concierto en sí.
Lamentablemente.

viernes, junio 03, 2005

The Monterrey Post 01

Pasan de las 10 de la noche.
Temperatura en el cuarto de Foco, el amigo que me hospeda en Monterrey: 29.4 grados. El calor ha superado mis expectativas. Las bermudas que traje "por si las dudas" serán -a no dudarlo- parte de mi atuendo este fin de semana.
Más allá del calor, el Tec de Monterrey es un lugar que vale la pena conocer: no tan grande pero a todo lujo. Imaginen que en la entrada al campus se encuentra una estela de piedra en la que se lee: "Todo el dinero del mundo no significa nada. Lo que perdura son las buenas acciones que hacemos para nuestros semejantes". Interesante bienvenida a una universidad que, me dicen, no cobra menos de 60 mil pesos por semestre a nivel licenciatura... Tienen pavorreales en los jardines, internet inalámbrico en áreas públicas y acceso irrestricto al estadio de los Rayados (caminamos por la pista sobre la que Ana Guevara volará el próximo fin de semana), entre otras linduras.
En un rato iremos a la Macroplaza a cenar con amigos de Foco. Hay posibilidades de visitar el que los ingenieros llaman aquí el Puente Atarantado (en realidad es Atirantado, claro) que, me dicen, es un buen espectáculo nocturno.
Para mañana el plan es todavía un poco incierto. Hay posibilidades de que vayamos a desayunar al Tec unos chilaquiles reversibles (alimento oficial de los Borregos). Luego al Museo de Arte Contemporáneo y por la tarde al Parque Fundidora para el concierto de los Dos Tenores y medio.
Me despido ya. Son las 10:22, y seguimos en 29.4 grados.
Ya sé por qué Pavarotti canceló su participación de mañana. No fue laringitis... ¡temía derretirse bajo el sol neoleonés!

miércoles, junio 01, 2005

Saca mi cerebro del frasco

El artículo de portada de la revista Chilango de este mes no tiene desperdicio. Se titula "¿Rebelde? ¡Mis calzones!" y es un análisis sociológico y mediático del "fenómeno" que la telenovela de Pedro Damián ha generado en meses recientes. Desde lo que cuesta uniformarse de rebelde (no menos de mil pesos si se cuentan los accesorios) hasta los motivos por los que el programa es tan popular incluso en niveles socioeconómicos no precisamente dados a las telenovelas (clases alta y media alta).
Las conclusiones al respecto de Álvaro Cueva, son muy elocuentes: los adolescentes y jóvenes mexicanos se conforman con poco: "¡Claro que habrá más Rebelde, la van a mantener! Están dirigiéndose a un público muy noble, muy poco crítico. Rebelde está consiguiendo mantener a este público, que necesita estos productos... y no hay muchos".
Yo no he visto la novela (¡en serio!) pero un día de estos lo haré con gusto. Por curiosidad, claro. No por las faldas breves, las piernas largas, los argumentos complacientes y las proyecciones aspiracionales... no, no.
¡Pero es que soy rebeldeee! (o como vaya la canción...:)